La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que, a nivel mundial, se producen más de 3.000.000 de muertes anuales relacionadas directamente con el consumo de alcohol. Por otro lado, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que entre un 15 y un 30 % de las víctimas de accidentes laborales podrían estar relacionadas con el consumo del alcohol y otras drogas, así como que los trabajadores con estos problemas presentan un absentismo laboral dos o tres veces mayor que el resto.
El alcohol y otras drogas afectan a un 5% de la población laboral española y es obvio que afecte al mundo empresarial, que demanda apoyo para poder abordar esa situación. En la última encuesta del Observatorio Español de la Droga y las Toxicomanías, un 87% de los trabajadores manifestaban que el alcohol y otras drogas eran un problema importante en su lugar de trabajo. Además, un 21% de los trabajadores afirma ser conocedor de personas que las consumen dentro de la jornada laboral.
Esta situación genera, obviamente, problemas de salud, conductas de riesgo, problemas familiares y económicos, absentismo, siniestralidad laboral, tensiones laborales, aislamiento social y problemas legales.
Para abordar esta problemática, Asepeyo y Proyecto Hombre han realizado una jornada on line de sensibilización prevista en el Plan General de Actividades Preventivas de la Seguridad Social. Jorge Serra Pallisa, experto en Psicosociología de Asepeyo, detalla que “la adicción es una enfermedad que requiere un tratamiento específico. El abordaje por parte de la empresa requiere apoyo al trabajador afectado, tolerancia 0 al consumo e implantar un programa de prevención”.
Es fundamental la implantación de hábitos saludables en la empresa, la implicación de todos los grupos de interés, desde la dirección hasta los propios trabajadores, porque se trata de una acción que, sin duda, beneficia a todas las partes y que repercute en el clima laboral, la productividad y la seguridad del propio trabajador afectado y de sus compañeros.
